Reiteró su inocencia el profesor de música acusado de abusos

“Soy inocente”. En torno a esa afirmación giró la declaración que ofreció ayer el docente Marcos Ledesma (37) ante el fiscal que lo indagó por los presuntos abusos sexuales a por lo menos 12 alumnos del jardín de infantes 914, de La Loma.

Durante 45 minutos, el profesor de música habló de su situación personal (es padre de un bebé de pocos meses); del modo en que daba las clases (dijo que a las actividades las realizaba en presencia de terceros); y que se sentía “perseguido” por los padres de los alumnos, al mencionar “los escraches” que le hicieron.

El fiscal Alvaro Garganta escuchó la declaración, lo interrogó sobre algunas cuestiones y dispuso que siguiera preso. Se estima que en los próximos días pedirá la preventiva del docente y la elevación a juicio de la causa.

Garganta también se reunió ayer con representantes del gremio Suteba, que nuclea a los docentes, quienes plantearon su preocupación por la situación de Ledesma y de otros profesores acusados por los mismos delitos. “Son situaciones complicadas”, admitieron los investigadores judiciales, aclarando que, en esta instancia, “hay sospechas suficientes para que en un juicio se aclare si hubo o un delito”.

Como se informó en la edición de ayer, Ledesma fue detenido el jueves a la tarde en 158 entre 63 y 64, después de que la Cámara Penal confirmó la revocatoria de eximición de prisión dispuesta por la jueza Marcela Garmendia en enero, con la sumatoria de nuevas denuncias a la causa.

Es que los cargos que enfrenta Ledesma -“abuso sexual agravado por el grave daño a la salud mental que le ha ocasionado a sus víctimas- en concurso real con corrupción de menores agravada por su condición de educador, todos ellos en concurso entre sí”- tiene previsto un monto de pena que no contempla la eximición de prisión.

El escándalo estalló el 5 de septiembre de 2013, cuando una nena que entonces tenía 4 años y concurría al jardín de infantes 914, situado en 42 y 22, le comentó a su mamá que “el profesor de música los ‘quería mucho’, ya que a ella y a otros compañeritos les daba besos en la boca”, figura en la causa.

La mujer le formuló varias preguntas a su hija, quien comentó que “el profesor Marcos, mediante juegos, les tocaba las partes íntimas a ella y a sus compañeritos y después ellos le realizaban tocamientos al profesor”, revelaron las fuentes.

Durante la instrucción de la causa, Garganta secuestró elementos de prueba en el establecimiento, como dibujos de los niños y un biombo, además de considerar “grabaciones caseras” que realizaron los padres de los chicos -todos de entre 3 y 5 años- en las que se los escucha relatar los presuntos toqueteos.

“Todos los nenes hacían referencia al juego del perro, el bicho peludo y el cuarto de castigo”, dijo un investigador refiriendo a una suerte de “patrón común”. Mencionó también que “se orinaban por las noches en la cama”.

Según la información que figura en la causa, una de las víctimas presentaría pequeñas lesiones que podrían ser indicativas de la existencia de un aparente abuso.

La causa arrancó con cuatro casos denunciados, a los que se le fueron sumando otros, hasta llegar a los 12 actuales. Los abogados que patrocinan a familiares de las víctimas denunciaron a la jueza Garmendia y a su secretaria por supuestas irregularidades en el incidente de eximición de prisión.