Estimado lector, muchas gracias por su interés en nuestras notas. Hemos incorporado el registro con el objetivo de mejorar la información que le brindamos de acuerdo a sus intereses. Para más información haga clic aquí

Enviar Sugerencia
Conectarse a través de Whatsapp
Temas del día:
Buscar
Revista Domingo |INTERÉS GENERAL

Tecnología: ¿Hacia el final de las inyecciones dolorosas?

Un parche recubierto por agujas microscópicas que se coloca sobre la epidermis permite administrar y monitorizar fármacos o extraer muestras para análisis en vez de usar las clásicas inyecciones hipodérmicas, con la sensación de que a uno le está lamiendo un gato

25 de Enero de 2015 | 00:00

Imagine que deben introducirle un medicamento determinado todos los días y que, para hacerlo, la enfermera solo les coloca sobre la piel un apósito plástico, un poco áspero al tacto, en lugar de pincharle con una aguja de acero. ¿Suena bien, verdad?.

Este nuevo instrumento médico, con la apariencia de una lámina cuadrada, translúcida y flexible, de alrededor de un centímetro de lado, estará disponible en menos de una década y lo han desarrollado Ryan Donnelly, profesor de Farmacia de la Universidad de Queens (www.qub.ac.uk), en Belfast, Irlanda del Norte, y su equipo de investigadores.

Este sistema, según el profesor Donnelly, “es un parche transdérmico o transdermal, que tiene en su superficie 361 minúsculas agujas muy duras y afiladas en la punta, pero que solo penetran en la capa superior de la piel, sin causar ningún dolor ni sangrado al paciente”.

“Estas agujas microscópicas o microagujas no entran en contacto con los nervios, ni con los vasos sanguíneos y, en el caso de algunos análisis concretos pueden recoger en la capa superior más externa de la piel el líquido intersticial que rodea las células y que contendría la información que pudiera necesitar su médico”, según Donnelly.

“De esta tecnología también podrían beneficiarse los pacientes con fobias a las agujas, aquellos que necesitan inyecciones continuas, como los diabéticos, o las personas mayores que tienen que tomar varias medicaciones al día”, explica la doctora Ester Caffarel, que participa en este proyecto

Las microagujas se reblandecen una vez usadas, e “incluso después de un minuto en la piel, están tan blandas que no se pueden reinsertar”, explica este investigador farmacéutico.

El equipo de Donnelly ha probado estos parches de polímero para administrar, desde insulina hasta ibuprofeno, y asegura que su sistema también puede acabar con la necesidad de refrigerar las vacunas, ya que dentro de estos apósitos, las inmunizaciones pueden permanecer estables y secas, incluso a altas temperaturas.

OPCIÓN PARA LOS BEBÉS PREMATUROS

De acuerdo a sus creadores, este sistema podría ser una buena solución para los bebés prematuros, que tienden a enfermarse a menudo y que suelen recibir mucha medicación o deben someterse a frecuentes extracciones de muestras de sangre, por medio de inyecciones o insertándoles una cánula, lo cual puede ocasionarles cicatrices, moretones y otros daños.

“Hemos desarrollado un nuevo tipo de parche transdérmico cuyas múltiples agujas diminutas perforan la piel ocasionando solo una sensación áspera, similar al contacto con la lengua de un gato o un trocito de ‘velcro’”, destaca Donnelly.

Añade que estas agujas se hinchan, convirtiéndose en un material gelatinoso que mantiene abiertos los orificios creados en el tejido epidérmico, permitiendo el suministro continuo de medicamentos o vacunas.

Además, “estas microagujas hinchables pueden extraer líquido de la piel para diferentes propósitos de monitoreo de pacientes, por lo que esta tecnología podría revolucionar, tanto la administración de medicamentos y vacunas, como en un futuro la realización de pruebas y análisis, sin los riesgos asociados de las agujas convencionales”, enfatiza el experto de Queens.

“Los investigadores de Belfast diseñaron las microagujas a partir de polímeros que, en contacto con medios acuosos, forman un material denominado hidrogel”, explica la doctora española Ester Caffarel, que participa en este proyecto.

“Así, han conseguido que las microagujas sean lo bastante rígidas como para que puedan ser insertadas en la piel sin romperse y que, una vez hinchadas, mantengan su integridad para poder ser retiradas también sin romperse”, añade Caffarel, que lleva más de 4 años en el proyecto tecnológico.

Según esta investigadora, “las microagujas tienen distintas ventajas para el suministro y el análisis de fármacos y pueden ser usadas para monitorizar las drogas activas en el organismo”.

“Por ejemplo, son útiles para determinar los niveles en el cuerpo de fármacos que, en pequeñas dosis no tendrían ningún efecto, y que resultarían tóxicos si exceden ciertos niveles de administración, como algunos utilizados para el infarto, la apoplejía, la insuficiencia renal o hepática o el cáncer y que se administran en ancianos, neonatos y bebés prematuros”, según Caffarel.

De acuerdo a Caffarel, “las microagujas tienen un menor coste de producción, puesto que los polímeros usados para fabricarlas son más económicos, e incluso podría aplicárselas el propio paciente, eliminando la necesidad de personal médico y el coste asociado”.

A PRUEBA DE INFECCIONES ¡Y FOBIAS!

“Con el uso de esta tecnología el riesgo de infección queda eliminado, ya que una vez insertadas en un paciente, las microagujas poliméricas pierden su rigidez y, consecuentemente, la capacidad de ser insertadas en la piel de otra persona”, añade la experta desde Belfast.

“381 minúsculas agujas muy duras y afiladas conforman el parche, pero en conjunto dan la sensación de estar en contacto con un ‘velcro’ o la lengua de un gato”, explica el profesor Ryan Donnelly, de la Universidad de Queens, en Belfast (Irlanda del Norte), quien dirige el proyecto

“Asimismo, este parche puede usarse en los pacientes con fobia a las agujas, en los bebés y en la población vulnerable, como los mayores, ya que es menos invasivo, tanto para suministrar como para monitorizar fármacos y, a diferencia de las agujas convencionales, no causa irritación, moretones o cicatrices”, indica Caffarel.

“Las microagujas que usan en la Universidad de Queens se hinchan al entrar en contacto con el líquido intersticial, creando canales acuosos que permiten el paso de moléculas de gran tamaño, como las proteínas”, matiza la especialista.

“Estudios preliminares, demostraron la capacidad que tiene este sistema para suministrar una gran variedad de fármacos, como el ibuprofeno, la insulina para tratar la diabetes y otras drogas solubles en agua como la teofilina y la cafeína”, explica.

“Asimismo, estas microagujas permiten administrar vacunas como la de la gripe y productos cosméticos, y tienen potencial para la terapia génica, en concreto, en terapias contra el cáncer. En este último caso se pueden administrar, además, moléculas sensibles a la luz que resultan tóxicas para las células cancerígenas”, según Caffarel.

“De esta tecnología podrían beneficiarse también los diabéticos o los mayores que tienen que tomar varios fármacos diariamente, puesto que en un mismo parche se pueden incorporar distintas sustancias para ser administradas”, explica la experta.

Actualmente los investigadores de Queen ensayan esta tecnología con fármacos de uso regular como el paracetamol o los antibióticos y creen que estará disponible para ser comercializadas en un período de 3 a 5 años.

“Este sistema tienen la posibilidad de reemplazar a las agujas convencionales en muchos campos ya que cubre la mayoría de sus aplicaciones, aunque existen excepciones, como cuando se necesita una gran dosis de un fármaco, por ejemplo un antibiótico para una infección aguda, para lo que las agujas convencionales seguirían siendo más efectivas”, según Caffarel.

Por este invento, el parche de microagujas, el Consejo de Investigación en Ciencias Biológicas y Biotecnología (BBSRC) británico (www.bbsrc.ac.uk) concedió al profesor Ryan Donnelly en 2013 el premio al ‘Innovador del Año”.

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE

ESTA NOTA ES EXCLUSIVA PARA SUSCRIPTORES

HA ALCANZADO EL LIMITE DE NOTAS GRATUITAS

Para disfrutar este artículo, análisis y más,
por favor, suscríbase a uno de nuestros planes digitales

¿Ya tiene suscripción? Ingresar

Básico Promocional

$120/mes

*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $2250

Acceso ilimitado a www.eldia.com

Suscribirme

Full Promocional

$160/mes

*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $3450

Acceso ilimitado a www.eldia.com

Acceso a la versión PDF

Beneficios Club El Día

Suscribirme
Ir al Inicio
cargando...
Básico Promocional
Acceso ilimitado a www.eldia.com
$120.-

POR MES*

*Costo por 3 meses. Luego $2250.-/mes
Mustang Cloud - CMS para portales de noticias

Para ver nuestro sitio correctamente gire la pantalla