El dólar ahorro contribuyó a frenar la disparada del blue

La evolución del “dólar ahorro” fue vital a la hora de marcarle el pulso al mercado cambiario y desde el Gobierno se lo considera un elemento casi tan importante como los swaps de China para que no se dispare el tipo de cambio oficial.

Esto es así porque se estima que el 90 por ciento de las personas que compran dólares para atesorar, con autorización de la AFIP, luego los comercializan por el mercado blue.

De esta forma, fueron los mismos ahorristas los que en la última etapa del 2014 frenaron la suba del dólar paralelo, hasta que se generó una sobreoferta, que además no impactó en el nivel de reservas, porque el Central lograba absorber parte de ese excedente que entregaba por “otro mostrador”.

Durante 2014 los argentinos hicieron 4,6 millones de operaciones a través de la AFIP por un valor de 30.000 millones de pesos, es decir 3.000 millones de dólares (incluido el 20 por ciento de la retención de la AFIP).

AYUDO A LA CALMA

Los ahorristas que en cada arranque de mes se fueron agolpando en la AFIP, le dieron una mano importante a Alejandro Vanoli al frente del Banco Central.

Hay que recordar que en octubre pasado, el mercado estaba inquieto por la falta de pago de los bonos que imposibilitó cumplimentar el fallo del juez Thomas Griesa.

Los temores de una nueva devaluación, como la que ya se había producido en enero hicieron que las ventas de billetes autorizadas por la AFIP se convirtiera en un termómetro de la incertidumbre que reinaba entre los ahorristas.

Pero, esos mismos compradores fueron funcionales al objetivo de frenar el precio del blue.

En este contexto, el comienzo de cada mes, la demanda de divisas estadounidenses al precio oficial (más un 20%) se disparaba, ante las mayores solicitudes de “ahorristas” que luego revendían en el mercado paralelo, movimiento que hizo que algunos analistas pasaran a llamarlo “dólar desahorro”.

CONSUMO

Así se llega a que durante el 2014, los argentinos se desprendieron en 2014 de casi $29.500 millones, los cuales no pudieron ser canalizados hacia otros destinos, como el consumo.

El dato cobra gran relevancia al considerar que ese volumen de pesos superó incluso a todas las ventas registradas en cerca de los 40 grandes centros de compras de la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano a lo largo de casi todo el año pasado, destaca un informe de un portal especializado.

Durante el período enero-noviembre, los más de 2.900 locales comerciales ubicados en 36 shoppings facturaron una cifra estimada de $28.800 millones, lo que deja a las claras cómo el “dólar ahorro” le jugó una fuerte pulseada al consumo.