El transporte ensaya unidad de la CGT

DIRIGENTES SINDICALES DEL TRANSPORTE, QUE ANUNCIARON PARA EL PRÓXIMO JUEVES UNA MEDIDA DE FUERZA. SERÁ PARCIAL PERO COMPLICARÁ LOS DESPLAZAMIENTOS EN LA HORA CLAVE PARA IR A TRABAJAR

Las medidas de protesta que anunciaron los gremios del transporte para el próximo jueves exhiben en la superficie una presión al Gobierno kirchnerista para que modifique la escala del impuesto a las Ganancias, aunque el trasfondo de la movida sindical radicaría en un intento por acercar posiciones entre las distintas CGT, con el objetivo de reunificar al movimiento obrero el año que viene.

Según pudo saber EL DIA, los principales dirigentes sindicales consideran que el nucleamiento en torno a los gremios del transporte puede transformarse en una punta de lanza para avanzar en la unidad entre sectores por ahora disgregados bajo las conducciones de Hugo Moyano, Antonio Caló y Luis Barrionuevo. Algunos dicen, incluso, que la reunificación tendrá lugar en marzo próximo.

LOS TIEMPOS

“Si fuera por algunos de nosotros, quisiéramos que la unidad se produzca ya, antes de fin de año. Pero otros compañeros piden paciencia, que pasen las vacaciones de verano, para luego provocar un impacto político con una foto conjunta”, delizó a este diario uno de los 22 jefes sindicales que el último jueves se reunieron a deliberar en la sede porteña de la Unión Tranviarios Automotor (UTA).

En este escenario, a los partidarios de la “unidad de la CGT” les vendría como anillo al dedo que el Gobierno persista en su rechazo a modificar Ganancias o al menos a eliminar el gravamen sobre el medio aguinaldo de diciembre, porque una descompresión del conflicto dejaría a los gremios con una excusa menos para sentarse a la misma mesa, aún cuando pertenecen a distintas centrales.

Uno de los popes sindicales que pilotea esta jugada es Roberto Fernández. El secretario general de la UTA resultó clave para el Gobierno durante el último paro decretado por Moyano, Barrionuevo y la CTA de Pablo Michelli, al no adherir a la medida de fuerza y posibilitar que los ciudadanos llegaran a sus lugares de trabajo en colectivos y subtes, que funcionaron casi con normalidad.

Pero ahora Fernández no dudó en mostrarse junto a Omar Maturano (La Fraternidad-Conductores de trenes) y a Juan Carlos Schmid (Dragado y Balizamiento) al momento de anunciar las asambleas de tres horas para el jueves, que en los hechos funcionarán como un paro encubierto entre las 4 y las 7 de la mañana. El reclamo por Ganancias y el bono de fin de año son elementos unificadores.

A tal punto que el titular de la CGT oficialista, Antonio Caló, se vio forzado a trasladar la demanda al jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, por la presión de las bases de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), que ven cómo la inflación hace estragos en los salarios del sector. “Si esto no se ordena desde la economía, las cosas se van a poner muy pesadas”, advirtió a su vez el moyanista Schmid.

El titular de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT) sostuvo que el Gobierno de Cristina Kirchner actúa en el caso del impuesto a las Ganancias como lo hiciera Domingo Cavallo en los años ´90, en los que el ministro de Economía “había diseñado una fórmula para disolver los aguinaldos a lo largo del año”. En el auditorio se escucharon risas sarcásticas.

ALINEAMIENTOS

Las palabras de Schmid fueron avaladas por los secretarios de los gremios de colectiveros, camioneros, ferroviarios, aeronáuticos, pilotos de cabotaje, patrones fluviales, recibidores de granos y guincheros, entre otros. En la vereda de enfrente quedan sindicatos oficialistas como la Unión Ferroviaria -alineada con el ministro Florencio Randazzo- y los peones de taxis de Omar Viviani.

Así, la idea de la “unidad en la acción” se convertiría en un ensayo para la reunificación de la CGT, en la cual Moyano y Caló no serían tenidos en cuenta para encabezarla, dado que se ganaron la enemistad de las distintas facciones. Pero más allá de los nombres, los gremialistas tienen un razonamiento de manual: juntos tendrían más fuerza para negociar su ingreso a la arena electoral. Habrá que ver cómo se mueven las fichas.