El tocador del buen tiempo

Es un hecho que no nos vestimos ni nos alimentamos de la misma forma cuando hace frío que cuando hace calor, y este es un principio que también se traslada al cuidado de la piel y los productos que usamos para ello.

Ahora que se acerca el buen tiempo, es momento de repasar el neceser y los estantes del baño, para colocar en primera línea los artículos que mejor cubrirán las necesidades de la piel durante los próximos meses.

Una renovación que, sin duda, ha de empezar por las cremas hidratantes. Si el invierno, con la drástica caída de las temperaturas, el viento cortante y la agresiva calefacción “pide” cremas muy emolientes y de textura untuosa, con la primavera y el verano la piel agradece texturas más ligeras y fluidas

FRESCOS Y FLUIDOS

Así, los fluidos hidratantes y los geles no grasos se convierten en la mejor opción, ya que hidratan sin dejar una sensación pesada o aceitosa en el cutis. Además de elegirlo en función del tipo de piel -seca, mixta o grasa-, la fórmula perfecta será aquella que cuente con factor de protección solar. ¡Mejor cuanto más alta!

El mercado ofrece hidratantes faciales anti-oxidante con té blanco que ahora se puede encontrar con factor de protección solar 25.

Otra opción muy veraniega para el rostro son las líneas de hoja de bambú, con texturas acuosas y fundentes que aportan frescor y energía a la piel, como sus fluidos de día y noche o la mascarilla energética que proporciona un “shock frío” a la piel.

El agua termal en spray es otro básico que conviene tener a mano durante la primavera y el verano, ya que aporta a la piel un plus de hidratación a la vez que la refresca. Farmacias y perfumerías comercializan comercializan versiones de su agua termal en recipientes de pequeño formato, ideales para llevar siempre en el bolso.

Además, el agua termal es una fabulosa aliada durante y después de la exposición al sol gracias a sus componentes, que le confieren propiedades calmantes.

Por supuesto, esta mención a la exposición solar lleva a otro de los productos que en los próximos meses no deben faltar en el neceser, pero, ante todo, sobre la piel.

EL SOL, A RAYA

Los protectores solares son los mejores amigos de una piel sana y ayudan a mantener a raya el envejecimiento cutáneo prematuro, siempre y cuando se usen de forma correcta y se evite abusar del sol y tomarlo a las horas en que los rayos son más potentes -entre las 12 del mediodía y las seis de la tarde-.

Con la llegada de la primavera prácticamente todas las firmas cosméticas presentan con bombos y platillos sus últimas innovaciones en este campo, pues no en vano los dermatólogos más destacados insisten en que los rayos UVA y UVB son los principales responsables del envejecimiento de la piel.

Por ello, la principal medida para mantener la juventud de la piel es el uso diario de protección solar, que debe ser aplicada media hora antes de exponer la piel a los rayos del astro rey para que los agentes protectores penetren adecuadamente.

Como novedades en este apartado llegan, protectores diarios con antioxidantes y fórmula fluida y no grasa, y nuevas fórmulas de la línea UV Protective Sun Care, entre ellas un spray protector de cara y cuerpo para niños con índice 30 y 50, y una barra de protección solar específica, perfecta para zonas como los ojos, la nariz, los labios y las orejas.

Algunas firmas ofrecen una gama que “genera para el rostro y el cuerpo un auténtico escudo para proteger las proteínas de la juventud” bajo el sol y que además tiene un perfil de aplicación discreto y agradable, sin rastros blanquecinos y con un fresco perfume.

Ahora que ya estamos concientizados de que la exposición al sol sin precauciones puede causar daños irreparables en el cutis, entra en escena otro de los productos estrella de los meses cálidos: el auto-bronceador.

Lejos queda aquella época en que el resultado de este tipo de cosmético era una piel naranja y mate, a menudo con ronchas debido a una aplicación poco uniforme.

EL MAQUILLAJE MÁS NATURAL

Los auto-bronceadores de última generación tienen formulaciones específicas para el rostro y el cuerpo, con resultados muy naturales, aunque para lograrlos es recomendable, antes de su aplicación, exfoliar la piel para eliminar las células muertas y conseguir un bronceado igualado. Por eso, otro de los cosméticos de la lista veraniega son los exfoliantes.

Entre las novedades en este apartado se encuentran productos con esferas exfoliantes que contienen vitamina E y que además de renovar la piel la deja preparada para el tratamiento anticelulítico, y otros con perlas de cera de abeja que activan la circulación y son fáciles de aplicar, pues se emplean como un gel de ducha.

El tocador para el buen tiempo no quedará completo sin un buen maquillaje con el que reproducir el bronceado sobre el rostro e igualar el tono del cutis sin tener que exponerlo a los rayos del sol. El producto estrella son los polvos de sol, compactos o sueltos, aunque cada temporada aparecen nuevos productos que lo complementan, como hidratantes coloreadas, bases fluidas y sombras.