Dudas y contradicciones sobre tratativas con los bancos

SEBASTIÁN PALLA, EX ECONOMÍA, AHORA CON LOS BANCOS

Las negociaciones que comenzaron ayer entre los enviados de la Asociación de Bancos Privados de Capital Argentina (ADEBA) con los fondos buitre se habrían caído cuando el ministro de Economía, Axel Kicillof señaló que se le iba a “pagar a todos por igual”.

Fuentes cercanas a la negociación explicaron a la agencia Dyn que “hubo reuniones todo el día, era todo normal, se estaban acercando posiciones hasta que empezó la conferencia de prensa del ministro”.

En ese momento, según las fuentes de la agencia de noticias, “los holdouts decidieron no seguir adelante” y la comitiva que lideró el economista Sebastián Palla decidió retornar a Buenos Aires.

Sin embargo, desde el portal de un diario económico, fuentes de esa negociación aseguraban que las conversaciones iban a continuar hoy después de pasar a un cuarto intermedio. Además, daba detalles de como sería el acuerdo. En ese sentido, se aseguraba que los houldouts estarían dispuestos a comprar el 100% de la deuda. Las entidades financieras pondrían en total unos u$s 1.400 millones .

Pero además trascendió que se sumarían empresas y que se buscaría pagar ahora u$s 250 millones -como garantía- y el resto en cuotas, siempre con títulos argentinos en dólares.

LA INICIATIVA PRIVADA

La iniciativa de los bancos se conoció el martes, aunque el Gobierno, a través de las declaraciones de ayer por la mañana del jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, y anoche del ministro de Economía, Axel Kicillof, se despegó de cualquier gestión por “temor a que se pudiera interpretar jurídicamente que fue una gestión pública, en vez de netamente privada”, aclaraban las fuentes oficiales.

“Pueden aparecer soluciones de este tipo”, dijo, de todos modos anoche en Nueva York, Kicillof, tras lo cual agregó que “hay muchos terceros que podrían tener intereses en remediar esa situación”, al referirse a la posibilidad de que surja una oferta de compra de los bonos defaulteados por parte de un grupo de bancos argentinos.

Kicillof subrayó que en la reunión mantenida con Pollack los representantes de los bancos que participarían de la operación no estuvieron presentes.

TRES OPCIONES

Temprano, el vicepresidente del Banco Ciudad, Juan Curutchet, describió que las entidades que impulsan la operación trabajan sobre tres opciones.

Una de ellas sería la de un “cash colateral”, consistente en depositar dinero en una cuenta del juzgado a modo de garantía para los fondos buitre.

La segunda hipótesis de trabajo sería la oferta de bonos a los holdouts por el importe que cubra lo determinado por el fallo de Griesa, unos 1.500 (ahora aseguran que sería 1.400) millones de dólares.

La tercera sería la compra parcial o total de los bonos en default en la cartera del fondo Elliot, que es el que ganó el juicio contra el país.

En declaraciones a Infobae TV, Curutchet señaló además que el banquero Jorge Brito (Macro) ofreció durante una reunión el martes en Adeba aportar 100 millones de dólares.

“El resto de los bancos aportaríamos cifras menores en proporción a sus depósitos y la liquidez que tengan”, dijo el funcionario del Banco Ciudad.

El vicepresidente de la entidad porteña consideró que la operación “es de sentido común” y que su participación hace a la “responsabilidad institucional”.

ESPECULACIONES

Finalmente, llegada la noche de la víspera, y sin comunicado de los litigantes tras la reunión ni nueva orden del juez Griesa, se especulaba con la posibilidad de un acuerdo privado aunque al cierre de esta edición nadie confirmaba ni desmentía nada.