Crece la esperanza de encontrar en el Sur al Doctor Muerte

Las autoridades del Centro Simon Wiesenthal aseguraron hoy que han aumentado las esperanzas de encontrar al ex jerarca nazi Aribert Heim, de 94 años, en la Patagonia argentina o chilena, dado que testigos confiables aseguran haberlo visto en la región en los últimos 45 días.

Efraim Zuroff, jefe del Centro Simon Wiesenthal en Jerusalén, señaló hoy en Buenos Aires: "Estamos mejor que hace dos semanas (antes del viaje). ¿Si hay una garantía que lo vamos a encontrar? No. Pero hay esperanza. El pueblo judío tiene una memoria muy larga y es de gran solidaridad".

"Hoy estoy más optimista de que vamos a encontrar a Heim. Recibimos informaciones importantes de personas muy confiables, que dicen que lo vieron durante los últimos 45 días. Según ellos Heim es visiblemente muy mayor, pero puede caminar sin ayuda. No quiero dar más detalles, (sobre) dónde y quiénes lo vieron", afirmó Zuroff.

Tanto Zuroff como Sergio Widder, representante en Sudamérica del Centro Wiesenthal, estuvieron en la Patagonia argentina y chilena siguiendo rastros de Heim, conocido como el "doctor muerte".

Durante la conferencia de prensa que brindó hoy en la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) en Buenos Aires, Zuroff indicó que "la edad de un criminal es irrelevante. Más importante es el estado psíquico del buscado. Si está en condición de ser juzgado, entonces debería ser juzgado. La edad no borra la culpa".

Indicó además que la investigación sobre el paradero de Heim se viene llevando a cabo desde hace años, con la cooperación "muy estrecha" de la Policía alemana, que cuenta con una unidad especial para dar con el ex jerarca nazi.

"Sospechamos que se está escondiendo en algún lugar entre Puerto Montt (Chile) y San Carlos de Bariloche (Argentina). La hija de Heim, Waltraud Diharce, viajó varias veces durante los últimos años de Puerto Montt (donde vive) a Bariloche. Y es conocido que allá se escondieron muchos criminales nazis", explicó Zuroff.

Además abogó para que las personas que están en contacto con Heim incurran en "algún error", al actuar bajo la presión de saberse perseguidos, y en tal sentido se ofrece una recompensa de 315.000 euros (unos 500.600 dólares), para quienes aporten datos que permitan detenerlo. Si Heim fuera encontrado, Alemania pediría la "extradición" para juzgarlo.

Heim es considerado uno de los principales criminales de la Segunda Guerra Mundial (1939-1945). Estuvo en tres campos de concentración alemanes y en el otoño de 1941 "asesinó a cientos de prisioneros inyectando gasolina directamente a sus corazones".

Zuroff relató que Heim usaba restos humanos como elementos decorativos en su oficina y que utilizaba una calavera como "pisapapeles". El director del Centro aseguró que el ex jerarca nazi llevaba "un registro preciso de todo lo que hacía".